domingo, 22 de diciembre de 2019

¿QUIÉN ES LA NAVIDAD PARA TI?

Sentada en el sofá de casa, mientras escuchaba música navideña de los años cincuenta, observaba impasible las luces del árbol. En ocasiones podía recrearme mirando por la ventana, observando la luz del sol, las nubes con su peculiar forma de algodón, la gente paseando, los niños corriendo, las hojas caducas cayendo por el vaivén del viento... era todo un paisaje de ensueño cuando vino una vez más al pensamiento el profundo sentido de la existencia y el poco valor que le damos a la vida, hasta que nos llega un tremendo impacto que parte en pedazos lo que creíamos ser.
En estás fechas tan señaladas, muchos son las personas que tienen depresión, muchos otros se suicidan, otros se quedan arruinados, otros pierden el sentido no solo por exceso de alcohol y vanas fiestas, sino por el derroche innecesario de dinero. Todo esto sumado da el resultado de un gran vacío.

Esta mañana, pasada la frustración de no haberme tocado la lotería, aunque sea la llamada pedrada en la cabeza, era ironía, no suelo jugar, pero sí sentía la pesada desilusión de la jactancia, le preguntaba al Señor qué podía escribir y tan sólo me venía a la mente unas preguntas: "¿Quién es para ti la Navidad?, ¿quién soy yo para ti?, ¿por qué no le dices al mundo quién soy para ti?."
Lo único que podía responder a esas preguntas después de recordar todas las experiencias de este año es: "mi vida no tiene sentido sin ti Señor, la Navidad para mi eres tú". Y es que la sociedad intenta por todos los medios ocultar la verdad con todo su fanatismo a la vanidad. Solo unos pocos somos los que aportamos la esencia de esta festividad. Y entre ellos no solo cristianos, sino personas que han perdido un ser querido, que siente el pesado vacío y dolor en su corazón, que cada día dan gracias a Dios por haberlos conocido aunque eso signifique que ya no estén a su lado, personas que debido a la enfermedad han estado en tierra de nadie y sus noches se cubrían de terrores al pensar que dejaban su mundo para ir a lo desconocido. Estas personas al renacer de lo más profundo de sus infiernos han aprendido el verdadero significado de un suspiro, de una mirada, del instante de una caricia, la alegría de una carcajada, el sentido de estar presente aunque sea en un silencio, e incluso dan gracias por el llanto, porque a través de el siente vida. Todas estas personas tienen un bonito regalo que darte y es el verdadero sentido de la existencia. En todas ellas, aunque no lo sepan verás la mano de Jesús, pues siempre estuvo ofreciéndoles consuelo y camino. Y en medio de todas sus luchas le regalaba insignias de la fuerza, y del valor de la existencia. Ninguna de esas personas, después de sus batallas han salido indiferentes, todas tienen mucho que enseñarnos. Como algunos de vosotros sabréis este año pasé por una depresión que me llevó a estar de baja por un largo periodo de tiempo, pero no hubo un día, ni una lágrima que me haya resultado en vano, en todos esos momentos estuvo mi gran amigo, enseñándome el gran precio de la vida y de su salvación. 
 Los regalos aunque son bonitos, y dan un toque de ilusión, no son el todo de la Navidad, porque nada tiene sentido si el amor, las personas que quieres, la estabilidad de la salud, la alegría de los niños y sobretodo el protagonista de esta gran festividad, Jesucristo, no está en nuestros días. Porque Dios es el único que te prometió algo, "paz en medio de tu tormenta y victoria". 
«Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.
S. Juan 16:33»

Porque el verdadero regalo de la Navidad es Jesucristo.

¿Y para ti quién es la Navidad?

He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros.
S. Mateo 1:23 RVR1960

Feliz Navidad a todos.

                      


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