miércoles, 17 de mayo de 2023

Vestigios de un infierno.

No expresaré el tiempo que hace que te marchaste, pues aunque no fuera ayer, lo recuerdo como tal. Lo prometo, no mereces ninguna de estas palabras. Pero...Tú, el causante de mi aflicción. El que tanto marcó a base de golpes y palabras sin remordimientos mi alma. 

Intenté remendar mi salvaje corazón pero ni con esas pude. Aún no... No dudes que cogeré fuerzas de entre mis cenizas y arreglaré el desastre que hiciste. Prendiste fuego y no quisiste apagar el incendio. Ahora ni tus demonios se comparecerán de ti. El cielo está expectante con tu vida, no sé si lo ignoras.

Lo juro, todo se paga en esta vida. Y en la otra aún más. 

No seré yo quien te lleve al infierno porque mi labor es perdonar tantos años de torturas, para no volver nunca más.

El destino que te espera tal vez sea mi consuelo, si Dios no lo remedia. Mientras tanto sigue acicalando tú hedonismo sin sentir ni un resquicio de arrepentimiento, por tanto daño causado gratuitamente.

Hasta nunca jamás, es mi último grito, quizás de victoria.







No hay comentarios:

Publicar un comentario