domingo, 9 de marzo de 2014

MARIONETA

Tan sola, tan triste, echada encima de la mesa de madera del carpintero que te creó, eres una marioneta, muy antigua y algo estropeada, ya casi inservible...
Tus cuerdas destensadas y algo liadas entre sí, tu pintura de la cara está desportillada y tu rostro algo sucio y parece un tanto vil ...
Ya no se oyen las risas de aquellos niños, ni sus aplausos, ni sus silencios sobrecogidos por la impresión y emoción de tu gran actuación.
Ya no quedan recuerdos de tu amiga la bailarina que tantos bailes clásicos dio al espectador, ya no está, desapareció una tarde sin que el tiempo se acordará de que un día ella bailó para tantos niños que guardaban sus asientos con emoción.
¡Ay marioneta! ¿Qué será de ti? han pasado muchos años y esos niños son ancianos ahora...
Ya no quedan niños en las calles jugando al balón, esperando con entusiasmo a que se montara el teatrino, ya no están los padres de aquellos niños que con gran carcajadas veían aquel guiñol.
Que época más bonita, parecía  que había más amor y con poco los niños se entretenían un montón, sí que es cierto que el hambre llenaba los corazones de dolor, sí, es cierto amor... Pero en aquellas tardes antiguas donde las abuelas se sentaban en su portal con un delantal y aquel refajo que tapaba todas sus piernas cansadas de tanto caminar en busca de pan o algo que echar en los platos de sus hijos... donde sus nietos jugaban con piedras, donde en las fiestas se montaban aquellos teatrillos ya olvidados para muchos, no recordados ni valorados para otros.
Ya no quedan tardes aquellas donde soñar con marionetas, títeres y guiñoles, donde pinocho asomaba su gran nariz de madera, donde la bailarina bailoteaba su gran vals, donde aquellos guiñoles contaban las historias de los pueblos con gran humor, no ya no están, ya se fue aquella época, ya solo queda un vago recuerdo en la memoria de unos pocos abuelos que contarán con gran esfuerzo a sus bisnietos la gran historia de pinocho que acabo siendo niño.
¡Ay marioneta de mi corazón! Fuiste de gran entretenimiento para aquellas gentes que guardaban en sus corazones gran dolor.
Y en aquella esperanzadora época siempre habrá un recuerdo de tu gran actuación... ¡Ay marioneta de mi corazón!

                              

Aquí os dejo el enlace que me dio ambiente a este relato: https://www.youtube.com/watch?v=ufNZNOHtQ3o&list=RDKKHeEw7whUQ

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