miércoles, 17 de mayo de 2023

Vestigios de un infierno.

No expresaré el tiempo que hace que te marchaste, pues aunque no fuera ayer, lo recuerdo como tal. Lo prometo, no mereces ninguna de estas palabras. Pero...Tú, el causante de mi aflicción. El que tanto marcó a base de golpes y palabras sin remordimientos mi alma. 

Intenté remendar mi salvaje corazón pero ni con esas pude. Aún no... No dudes que cogeré fuerzas de entre mis cenizas y arreglaré el desastre que hiciste. Prendiste fuego y no quisiste apagar el incendio. Ahora ni tus demonios se comparecerán de ti. El cielo está expectante con tu vida, no sé si lo ignoras.

Lo juro, todo se paga en esta vida. Y en la otra aún más. 

No seré yo quien te lleve al infierno porque mi labor es perdonar tantos años de torturas, para no volver nunca más.

El destino que te espera tal vez sea mi consuelo, si Dios no lo remedia. Mientras tanto sigue acicalando tú hedonismo sin sentir ni un resquicio de arrepentimiento, por tanto daño causado gratuitamente.

Hasta nunca jamás, es mi último grito, quizás de victoria.







sábado, 14 de enero de 2023

VITA NOVA.

 



Déjame que te cuente...

Era un viernes al mediodía, algo pasó al mirar aquel suelo. En cierta medida no podía traer a memoria aquellos instantes.

Yo fuí aquellos pedazos que dejé abandonados en el camino.

Cada uno de ellos ya olvidados en un pasado inerte, cada uno de ellos, era yo.

Por algún motivo ya no duelen, aunque insista a veces en llamar a la puerta, se me hace imposible recordar aquel aroma.

El viento se llevó todos los recuerdos dejando a su paso una oquedad frívola y vacía.

Ya no existen rincones, ni telarañas sucias y baratas.

Aunque se quedaron muchas melodías en el tintero, todas ellas se secaron y se arrojaron al erebo.

¿No hay posibilidad de traerlos de vuelta aunque sea en sueños?

No, pues la luz de aquel tiempo se apagó, el aire arrastró las cenizas que quedaron y el tiempo meticulosamente ha hecho su trabajo.


Tan solo queda futuro. La posibilidad de abrazar un propósito esperanzador.




📷: Rock and Roll sur les Quais, París, c1952 (Paul Almasy)






miércoles, 30 de diciembre de 2020

Adiós 2020.

Cierro suavemente los ojos mientras trato de ocultar y desechar toda esta tristeza.

Ssss, ¡escucha! Oigo de fondo la canción con la que te despedimos. ¡Por Dios! ¿Quién me diría que dejaría de ser hija para ser solamente madre? Te has ido para no volver.

Pero un día, no en este mundo, porque nuestra tierra no es de aquí, nos volveremos a ver.

Y mientras tanto aún escondo en los rincones tu voz, y el amor que nos teníamos.

Tú sillón sigue vacío, y sé que no hay persona en el mundo que llene ese hueco.

Me has roto el corazón, y tal vez estando en esta bola terráquea, no sé si volveré a unir cada pedazo, pero prometo que lucharé por un futuro lleno de fruto. Me has dejado el relevo refulgente y aún no tengo fuerzas para tomarlo.

¿Por qué no me dijiste qué pasaría con tu partida, belleza indómita? 

Respiro tratando de calmar esta sensación de ahogo, por momentos parece anestesiante.

Los pensamientos huyen cada mañana sin propósito alguno, pero si en algún momento desearan volver para torturar este alma dolida... con ira cerraré la puerta, recordando que todo es vanidad y que ya nada será igual. No sostengo la negativa, pero aún los hechos no desean aflorar a la realidad. Solo es tiempo, y el tiempo es creador. Y el creador sostiene el tiempo entre sus dedos, y él me ama, y de momento eso me basta.


Y entré lágrimas y brindis le digo adiós a este año,  no le dedico palabras a nadie más, porque no creo que nadie las necesite. Pero si alguien en este mundo necesitase un abrazo de despedida, una mano que le ayude a pasar el siguiente año, una mirada de paz, una caricia, un beso, ó una palabra que llene ese espacio, aquí estaré a su lado, sin dudas, sin reclamos. No hay nada más bonito que regalar amor. Y tengo amor de sobra, con la paciencia que cada instante necesita. Pues así me lo enseñó mi niña mayor, mi madre.


🥂Adiós 2020🥂, te has llevado entre tus vientos muchas lágrimas, muchas risas, muchas canciones pero jamás pensé que entre ellas irían las mías.

Momentos tristes, pero llenos de esperanza.

Adiós año viejuno, adiós, ya nunca volverán a sentarse entre tu regazo, de aquí a poco habrás quedado en nada y daremos paso a los nuevos sueños.

A la nueva esperanza.

🥂Feliz año nuevo a todos.🥂

No dejes de soñar. https://youtu.be/xd0hgKMkMf8



jueves, 24 de diciembre de 2020

DICEN POR AHÍ QUE DIOS SE HA VUELTO LOCO

Dicen por ahí que Dios se ha vuelto loco, que se hizo un niño pobre y que creció en el barro como tú y yo. Dicen que una niña campesina lo tomó en sus manos, lo arrulló en sus brazos, y le daba amor.

Dicen por ahí que Dios se ha vuelto loco. Que dejó el cielo y a sus ángeles en gloria, y con maleta en mano se mudó a nuestra colonia, y sin más protección que sus sandalias rotas vino a compartir nuestro pan y nuestras derrotas. 

Dicen que dejó su trono allá en el monte santo, para sentarse a donde los culpables tienen su banco, y que abandonó el paraíso prometido para conocer en carne propia mis infiernos más temidos.

Dicen que Dios se ha vuelto loco. Que llegó esa noche de sorpresa cuando no esperábamos a nadie en nuestra mesa, cuando ya creíamos que Dios nos había olvidado, y no contábamos con que quería caminar a nuestro lado. 

Dicen que huyó de su tierra natal, y como emigrante tuvo que esconderse al caminar. Refugiado en el silencio, perseguido por la ley. Ese fue su pan y la copa agria que escogió beber.

Dicen que esa fue su locura, que siendo el eterno e inalcanzable, se hizo el invitado en nuestro hogar, que aceptó las reglas de nuestro juego y en nuestras suelas quiso caminar.

Dios se enamoró de ti, de mí cuando éramos necios y como amantes enloquecido, vulnerable se volvió a nuestros desprecios. 

Pudo habernos obligado a amarle. Pudo habernos convencido a adorarle. Pero no, eligió la ruta del Isaías, aquellos que nos llevan a servirles con sus leyes, pero, él para conquistarnos, se volvió de carne y hueso. Se convirtió en uno de nosotros para amarnos. Por eso celebramos en esta noche fría, aquello que siendo una paradoja, se convirtió en una bella poesía, y aquél que sostiene el universo con su mano, cruzó el infinito mar de estrellas, para hacerse nuestro Padre, nuestro Amigo, y nuestro Hermano.

Ulizes Oyarzún


Feliz Navidad a todos. 

Este año acojo las palabras silenciadas por cada momento vivido en este 2020, pero quiero que sepan que a pesar de todo, la vida sigue y es digna de sentirla, vivirla, de abrazar cada instante con agradecimiento aunque el dolor a veces persista.

Cristo prometió no abandonarnos y por ello decidí seguirle. Y es un lujo saber que el Dios de nuestro universo extiende su mano para ayudarnos en los momentos más oscuros.

Por eso hoy celebro con el corazón en la mano, Emmanuel, que significa Dios con nosotros.

He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros.

S. Mateo 1:23


           


lunes, 6 de enero de 2020

QUERIDOS MAGOS

Queridos Magos: 

Somos conscientes de que sois sabios y entendidos de la astronomía y de todo tipo de Ciencias y Artes que tengan relación con el universo, la religión y sus profecías. 
También sabemos que estáis enterados del nacimiento de un Mesías, de aquel que según las treinta y tres profecías judías, viene a salvar a la humanidad. Puesto que tenemos consciencia que en su busca vais, habéis de saber que no es un Dios común, es bueno, amable, sufrido y amigo de pecadores. ¡Dejadle buena ofrenda!
Porque siendo Rey, se destronará y se despojará de sí mismo. Conocemos que viene a este mundo para ser herido en casa de sus amigos; Y tales heridas, tan profundas serán, que llevarán sellados sus nombres a la eternidad. Morirá por amor, caminará en el calvario y su sudor... gotas de sangre.
Expuesto y desnudo, por burladores escupido, hasta la última gota de su sangre derramará. Morirá sin tacha y pecado, el Santo de Dios lo llamarán. Con su muerte y resurrección habrá de vencer a la muerte y al pecado. 
Será tanto su resplandor que el mismo infierno lo desterrará y por ello pondrá la tierra ante el estrado de sus pies. 

Queridos Magos, puesto que ya sabéis de su gran revelación, quiero que hagáis algo por mi. Este año en vez  de regalos, quiero que le llevéis todo mi agradecimiento, mi amor y mi servicio. 
Porque el verdadero regalo de los Reyes magos es él, Emmanuel Dios con nosotros.

El baúl de Cenicienta.
                         

domingo, 22 de diciembre de 2019

¿QUIÉN ES LA NAVIDAD PARA TI?

Sentada en el sofá de casa, mientras escuchaba música navideña de los años cincuenta, observaba impasible las luces del árbol. En ocasiones podía recrearme mirando por la ventana, observando la luz del sol, las nubes con su peculiar forma de algodón, la gente paseando, los niños corriendo, las hojas caducas cayendo por el vaivén del viento... era todo un paisaje de ensueño cuando vino una vez más al pensamiento el profundo sentido de la existencia y el poco valor que le damos a la vida, hasta que nos llega un tremendo impacto que parte en pedazos lo que creíamos ser.
En estás fechas tan señaladas, muchos son las personas que tienen depresión, muchos otros se suicidan, otros se quedan arruinados, otros pierden el sentido no solo por exceso de alcohol y vanas fiestas, sino por el derroche innecesario de dinero. Todo esto sumado da el resultado de un gran vacío.

Esta mañana, pasada la frustración de no haberme tocado la lotería, aunque sea la llamada pedrada en la cabeza, era ironía, no suelo jugar, pero sí sentía la pesada desilusión de la jactancia, le preguntaba al Señor qué podía escribir y tan sólo me venía a la mente unas preguntas: "¿Quién es para ti la Navidad?, ¿quién soy yo para ti?, ¿por qué no le dices al mundo quién soy para ti?."
Lo único que podía responder a esas preguntas después de recordar todas las experiencias de este año es: "mi vida no tiene sentido sin ti Señor, la Navidad para mi eres tú". Y es que la sociedad intenta por todos los medios ocultar la verdad con todo su fanatismo a la vanidad. Solo unos pocos somos los que aportamos la esencia de esta festividad. Y entre ellos no solo cristianos, sino personas que han perdido un ser querido, que siente el pesado vacío y dolor en su corazón, que cada día dan gracias a Dios por haberlos conocido aunque eso signifique que ya no estén a su lado, personas que debido a la enfermedad han estado en tierra de nadie y sus noches se cubrían de terrores al pensar que dejaban su mundo para ir a lo desconocido. Estas personas al renacer de lo más profundo de sus infiernos han aprendido el verdadero significado de un suspiro, de una mirada, del instante de una caricia, la alegría de una carcajada, el sentido de estar presente aunque sea en un silencio, e incluso dan gracias por el llanto, porque a través de el siente vida. Todas estas personas tienen un bonito regalo que darte y es el verdadero sentido de la existencia. En todas ellas, aunque no lo sepan verás la mano de Jesús, pues siempre estuvo ofreciéndoles consuelo y camino. Y en medio de todas sus luchas le regalaba insignias de la fuerza, y del valor de la existencia. Ninguna de esas personas, después de sus batallas han salido indiferentes, todas tienen mucho que enseñarnos. Como algunos de vosotros sabréis este año pasé por una depresión que me llevó a estar de baja por un largo periodo de tiempo, pero no hubo un día, ni una lágrima que me haya resultado en vano, en todos esos momentos estuvo mi gran amigo, enseñándome el gran precio de la vida y de su salvación. 
 Los regalos aunque son bonitos, y dan un toque de ilusión, no son el todo de la Navidad, porque nada tiene sentido si el amor, las personas que quieres, la estabilidad de la salud, la alegría de los niños y sobretodo el protagonista de esta gran festividad, Jesucristo, no está en nuestros días. Porque Dios es el único que te prometió algo, "paz en medio de tu tormenta y victoria". 
«Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.
S. Juan 16:33»

Porque el verdadero regalo de la Navidad es Jesucristo.

¿Y para ti quién es la Navidad?

He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros.
S. Mateo 1:23 RVR1960

Feliz Navidad a todos.

                      


lunes, 28 de octubre de 2019

¿TODAVÍA NO CREES EN ÉL?

Hoy en día son muchos los que comparan la vida de Jesús con mitologías.
Son muchos los que creen que Jesús fue un mito. Pero olvidan que la historia mitológica está basada simplemente en personajes mitológicos, en cambio los eventos de la vida de Jesús, como resurrección, nacimiento virginal, etc, fueron dados en una persona real de carne y hueso, a la cual los escritores de los evangelios conocieron personalmente. ¿Por qué razón sino iban ellos a entregar su vida basándose en una mentira? Nadie sería capaz de respaldar una mentira hasta la muerte.
¿Lo has pensado alguna vez?

«Si alguien puede demostrar que Cristo no fue levantado de entre los muertos, yo no tengo derecho a seguir manteniendo mi fe Cristiana.»

- John McDowel.

                              
                           

martes, 15 de octubre de 2019

LA PERLA.

Cuando las ostras son pequeñas no tienen ninguna protección, por lo que flotan en el agua como si fueran medusas. Después, cuando se les empieza a formar la concha, se van al fondo del mar, y ahí se adhieren a las rocas y se abren un poquito para dejar entrar a los organismos microscópicos que le sirven de alimento (plancton). Entre el agua que el plancton lleva, a veces se cuela un grano de arena o un animal diminuto, entonces las ostras, como un mecanismo de defensa, segregan una sustancia conocida como nácar, la cual cubre al objeto extraño hasta convertirlo poco a poco en perla. Este increíble proceso tarda entre tres y seis años.

- Muy Interesante.

Leyendo esto podemos entender que la perla es baba de molusco producida por una infección. Es algo que entra muy profundo causando una molestia o dolor, y poco a poco ese objeto molesto o doloroso es envuelto por su propia baba, hasta así producir lo que llamamos algo hermoso; una perla de gran precio. Ósea, de algo doloroso saca algo increíblemente bello.

¿Tú qué produces cuando te lastiman? 
¿Ira, rabia, deseo de venganza...?

Cuando el Señor Jesús estaba en la cruz y escuchaba toda clase de comentarios malvados dijo: «Perdónalos padre, qué no sabe lo que hacen.» 
Poco después, al ladrón que estaba justo al lado suyo, le regaló una entrada directa al paraíso, ahí en ese mismo momento, a pesar de su dolor, produjo una gran perla de misericordia.
Y así podía escribir muchos pasajes y ejemplos. 
Esto que la naturaleza nos regala día a día, es una parábola viva de lo que es el Reino de Dios en tu vida y en la mía.

Produzcamos más perlas de amor, pero no nos frustremos al primer intento, recordad que una ostra tarda hasta seis años en producir una bella perla, cuánto más nosotros, sabiendo que nuestra naturaleza es débil. 

Esta luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no han podido apagarla.
San Juan 1:5 

Seamos pues como esta luz, esforzados y valientes.

Les aseguro que si el grano de trigo al caer en tierra no muere, queda él solo; pero si muere, da abundante cosecha.
San Juan 12:24 

Está parábola es semejante a la ostra, para producir fruto de buenas obras, primero hay que perseverar y negarse así mismo.
Reconozco que es un ejercicio un tanto difícil, yo aún estoy en ello, y me queda carrera, cada día siento que acabo de empezar. Y os aseguro que cuesta mucho y más cuando lo intentas por tus propios medios, pero cuando lo haces con la ayuda del Señor, entonces todo cambia y se vuelve más liviano.

Vengan a mí todos ustedes que están cansados de sus trabajos y cargas, y yo los haré descansar.  Acepten el yugo que les pongo, y aprendan de mí, que soy paciente y de corazón humilde; así encontrarán descanso. Porque el yugo que les pongo y la carga que les doy a llevar son ligeros.»
San Mateo 11:28-30.

Dios les bendiga.
        

lunes, 14 de octubre de 2019

TE PERDONO.

Si quieres enfurecer a tu enemigo, perdónalo.

- Oscar Wilde.

Con esta y otras citas, comencé a darme cuenta el tiempo que había perdido reteniendo el rencor, y es que no superaba la idea de tener que perder otra vez... Al instante supe que no tenía un problema, sino dos, y bastante frustrantes, uno el rencor ó falta de perdón y otro el orgullo. ¿Con qué mataría yo a estos dos ladrones de almas?

Dicen que el tiempo lo cura todo. Pero eso no es del todo cierto, a mi el tiempo me enfermaba; Enfermó el espacio en el que habitaba.
Ensucié mis costumbres con los recuerdos y con mi boca escupía en todos los rincones. Destrocé mi corazón. ¿Sabes lo que más me incapacitada? El hecho de saber que a pesar de todo, esas personas eran felices. No les importaba lo más mínimo el daño causado. No había habido de por medio ni una mínima palabra de disculpas. El frasco de veneno lo tenía en mis manos dispuesto a ser tomado, pensando que con ello dañaría así a mis enemigos, y no me estaba percatando que era una vía directa al suicidio emocional. Fueron momentos de mucha debilidad. Y fue ahí en lo más oscuro de mi ser, cuando humildemente y en un acto de humillación, le dije al Señor: «Te cedo este capítulo, no puedo con él, me hace más daño el retenerlo que el dejarlo ir.»

Y cómo bien sabemos, Dios es amor, y si no nos limpiamos con el perdón, no hay posibilidad de sentarnos junto a su mesa y comer de todo aquello que nos tiene preparado.

 Así que solo hubo unas palabras más que tuve que decir: «te perdono». Y todo aquel manto de amargura al instante se desvaneció.

Tuvo que pasar tiempo para que mi vida retomara su esencia, dejando atrás todas esas oscuras experiencias. Pero el dolor ya no estaba. Y cuando observé por un instante todo aquello que había dejado a mis espaldas, todos aquellos enemigos que me hicieron daño, estaban enfurecidos porque el perdón llamó a su puerta y con ello el olvido. 
No me alegré pero entonces te das cuenta que cuando haces caso al Señor se cumple su palabra en ti.  

Aunque pase por el más oscuro de los valles, no temeré peligro alguno, porque tú, Señor, estás conmigo; tu vara y tu bastón me inspiran confianza.  *Me has preparado un banquete ante los ojos de mis enemigos; has vertido perfume en mi cabeza, y has llenado mi copa a rebosar.*  Tu bondad y tu amor me acompañan a lo largo de mis días, y en tu casa, oh Señor, por siempre viviré.
Salmos 23:4‭-‬6 

                           

jueves, 10 de octubre de 2019

CARTA A EVA.

La visita de esta mañana, me ha recordado lo mucho que te he necesitado y extrañado durante el periodo de tu ausencia. Hubieron veces, momentos de dura introspección, que le preguntaba a Dios los motivos por el cual el capítulo contigo se había borrado del camino un día sin más. Sin un final al menos que contar. Le supliqué que me concediera el placer de tenerte cerca, o al menos la distancia suficientemente prudente con la cual no estropee con mi torpeza la amistad. Porque habías formado parte de mi identidad, de mi vida. Nunca fuiste una persona que entraste para salir por la misma puerta. Fuiste de esos corazones que sin más se quedaron, pero muy adentro, para observarlo todo desde sus ojos. 
No sé aún cómo es mirar desde tus ojos, pero tiene que ser maravilloso para que a pesar del tiempo... estés aquí como si el tal se hubiera rendido a nuestros pies. 
Formaste con tu voz un trozo de mi persona, de mi identidad.
Aún recuerdo todas la noches de largos coloquios donde afloraba la ilusión que desprendía nuestra gran inocencia.

 La amistad es necesaria. Jesús creía en la amistad. Él es amigo de sus discípulos, y se hizo de amar. Me ayudó a entender que la verdadera amistad supera el paso del tiempo, los daños, los errores... Y no sabes cuánto lamento la falta de neuronas que tenía en aquella época. La simpleza con que me caracterizaba. Tengo la sensación de que vemos las cosas en parte, como a través de un espejo. Aunque me grites diciéndome que mi personalidad es tan mágica... He podido abrir una brecha en el tiempo y ver lo torpe que he sido. Tus gafas eran tan lilas, tan firmes y a su vez tan dulces; En cambio las mías eran frágiles, postulantes, pero necesitadas e inseguras. No puedo lamentarme de un pasado inerte que no sabe hacer nada más que simplemente ser ecos. Es mi percepción, perdóname si con ella te daño.
Fue maravilloso oír tu voz decir que mi hogar huele a mi... supe que dirías eso en el momento que me enteré de tu llegada. Son instantes que no quiero olvidar, porque son nuestros, nuestras palabras, nuestros momentos.

Y todo esto tan metafórico y poético es sólo para decirte que no estaría mal de vez en cuando un café enemistado con la nicotina. Al menos yo echo en falta los cafés que no me tomé junto a tu inigualable compañía.

Siempre fuiste mi mejor amiga.

                            

lunes, 12 de agosto de 2019

SIN VENTANAS.

Felicidad, esa palabra imposible de detenerse en el corazón hasta la eternidad.
Tan buscada, y tan poco hallada, tan necesaria y pocos son los que la regalan.

En aquel cuarto, los paisajes no eran necesarios, la luz era tan suave que se podía respirar la calma que prometía parar el tiempo.
Suave melodía encogía con cobijo el alma. No, no necesitaba ventanas, no habrían suficientes paisajes para igual aquella brecha que se abrió del cielo, camino a mi presente. Fueron segundos, el aroma que se desprendía no se despidió, la felicidad efímera se presentó, y con gran deseo se dejó acariciar. Era su mirada tan profunda, su respiración pausada susurraba calma, su dulce anatomía segregaba confianza. Se hizo enigmático, no, no necesitaba ventanas con paisajes sublimes, ya tenía una ventana abierta al cielo. Tan solo con su mirada, creaba un mundo donde las mariposas, las luciérnagas, la olor de las flores, la suavidad de las plumas, y la música fluían como si no hubiera un final. Únicamente necesitábamos estar anidados el uno con el otro para poder sentirlo. 

Porque a veces Dios usa las cosas cotidianas para acercarnos el cielo.

      «El regazo de una madre.»

Y así es: tú me hiciste nacer del vientre de mi madre; en su pecho me hiciste descansar.
Salmos 22:9 
                               

martes, 18 de junio de 2019

RENGLONES TORCIDOS.

Tan solo a veces, necesitamos deleitarnos en plasmar letras de los recodos que guardamos en el interior de nuestro ser. Tan solo a veces...

Otras simplemente decidimos respirar profundamente para aferrarnos a la negativa del yo. Por amor, un "no" rotundo es suficiente referencia para saber que un adiós romperá multitud de ataduras. A veces el tiempo lo hace todo, y duele.


Desearía que todo pasase, desearía que el olvido, el perdón y la liberación hiciera su trabajo, pero el deseo no es suficiente, la fe sí.

Por eso estoy donde estoy, porque la fe me cogió de la mano para llevarme a lugares dónde ojo no vio. Y allí se encuentra nuestra visión.


Sólo dejaré unas letras de una canción que ha marcado con un escaso sello alguna parte de mi. Porque a veces, tan solo a veces somos poema escrito.


"RENGLONES TORCIDOS. Marwan."

Tu nombre es una herida que supura en mi memoria.
Tu risa es una bomba que no sé desactivar.
Hablar de amor contigo es encerrarse en una noria.
Querernos es subir a un tren que nunca va a arrancar.
Tenías el cordón yo solo era la peonza.
Así entendí que nadie sale intacto del amor.
Cansado de que no pusieras nombre a nuestra historia.
Me fui a ninguna parte a terminar esta canción.


Y hoy ya no escribo la vida en renglones torcidos.
Prefiero quedarme conmigo.
Prefiero un punto y aparte a que vuelvan a darme puntos suspensivos.
Mejor olvidarse del ruido, cada uno en su propio camino.
Habrá que apuntar en la agenda los sueños pendientes que nunca cumplimos.


Amor es solo un juego donde solamente acierta.
Quien abre el corazón para que dos puedan entrar.
No hay nada más terrible que una puerta entreabierta.
Que nunca abre del todo ni se atreve a cerrar.
Me fui porque quererte era un deporte peligroso.
Se parecía demasiado a la soledad.
No sé si acerté pero sí sé que poco a poco.
Mi vida empieza a parecerse a la felicidad.


Y hoy ya no escribo la vida en renglones torcidos.
Prefiero quedarme conmigo.
Prefiero un punto y aparte a que vuelvan a darme puntos suspensivos.
Mejor olvidarse del ruido, cada uno en su propio camino.
Habrá que apuntar en la agenda los sueños pendientes.


Me fui porque el amor era un manual sin instrucciones.
Y tú y yo dos piezas imposibles de encajar.
Me fui a refugiarme entre mi pena y mis canciones.
Me fui porque en tu cama no podíamos soñar.
Y ya no escribo, y ya no escribo.


Y ya no escribo la vida en renglones torcidos.
Prefiero quedarme conmigo.
Prefiero un punto y aparte a que vuelvan a darme puntos suspensivos.
Mejor olvidarse del ruido, cada uno en su propio camino.
Habrá que apuntar en la agenda los sueños pendientes que nunca cumplimos.
Que nunca cumplimos.


Renglones torcidos. Marwan. https://youtu.be/W0RhUUMKdsE



miércoles, 2 de enero de 2019

ES POSIBLE.


“Dicen que antes de que un río entre en el mar, tiembla de miedo. Mira para atrás, y vé todo el recorrido del día, observa las cumbres y las montañas, el largo y sinuoso camino que atravesó entre selvas y pueblos, y divisa hacia adelante un océano tan extenso, que entrar en él, es nada más que desaparecer para siempre. Pero no existe otra manera. El río no puede volver. Nadie puede volver. Volver es imposible en la existencia. El río precisa arriesgarse y entrar al océano. Solamente al entrar en él, el miedo desaparecerá, porque apenas en ese momento, sabrá que no se trata de desaparecer en él, sino volverse océano.” 

(Osho, citando Khalil Gilbran) 

*Es imposible revivir el 2018, posiblemente algunos ni lo desearían, pero el 2019 es muy factible para que sea nuestro océano posible.*

¡Por un 2019 lleno de posibilidades!

                                                  

lunes, 24 de diciembre de 2018

NO EXISTE NAVIDAD SIN JESÚS.

Para mi este año que se despide con la Navidad, tiene en las espaldas demasiadas cosas buenas, y lleva inscrita en sus andares la palabra "agradecimiento".
Y es que tengo tanto que agradecer a Dios y a las personas que me rodean... que han hecho de mi cada día una mejor persona.

 Este año, he podido disfrutar de grandes logros, de bellas promesas, de inquietantes momentos llenos de risas, y aunque he sufrido momentos muy oscuros, que me han llevado a una introspección más profunda... nunca conseguí dejarme vencer por la tristeza, la derrota y el sentimiento de decepción, pues el Señor siempre ha cambiado mi lamento en baile cuando menos lo esperaba. No entiendo como logra hacerlo, pero su mano siempre está para sostenerme y sacarme del desierto con el más bello milagro. 
Y es que Jesús desde que decidió bajar a la tierra con su gran Natividad, se hizo amigo de este mundo, y aunque todos decidimos darle la espalda, quiso compartir nuestras derrotas, conocer nuestros infiernos más temidos, llenar nuestras mesas con su pan y su presencia, deseó convertir en victoria nuestras batallas, y habitar en medio de nuestra soledad. Le supo a gloria su muerte, pues vio reflejado en el brillo de su sangre, su sonrisa al ver tu rostro mirar hacia él. Sintió el paraíso en su humilde nacimiento, pues vio reflejado en las estrellas, aquellas vestiduras de reyes que habemos de vestir cuando le veamos nuevamente. No fue en balde su nacimiento y menos su muerte. Pues Jesús vino a este mundo no solo para vivir como tú y como yo, sino para morir por ti y por mi. (Así que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificación de vida. Romanos 5:18)  De este modo y con este pensamiento debemos celebrar la Navidad, porque no hay Navidad sin Jesús. 

Por tanto, el Señor mismo os dará una señal: He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel. Isaías 7:14.

              FELIZ NAVIDAD A TODOS.


                         

miércoles, 14 de noviembre de 2018

LA MUJER QUE TOCÓ EL MANTO.

Entonces Jesús y sus discípulos se levantaron y fueron con él. Justo en ese momento, una mujer quien hacía doce años que sufría de una hemorragia continua se le acercó por detrás. Tocó el fleco de la túnica de Jesús porque pensó: «Si tan solo toco su túnica, quedaré sana». Jesús se dio vuelta, y cuando la vio le dijo: «¡Ánimo, hija! Tu fe te ha sanado». Y la mujer quedó sana en ese instante.
Mateo 9:19‭-‬22 NTV

Me gustaría compartir algo bonito, tanto... que me ha calado muy profundamente en el corazón. Estando orando esta mañana sentí del Espíritu Santo, «ve y alcanza mi manto...» y voy al versículo de la Biblia donde aparece esta parte, y me dí cuenta de algo tan simple y que suele pasar desapercibido. «EL SEÑOR ESTABA DE ESPALDAS A ESA MUJER.» Jesús no iba hacia ella, tampoco se cruzaban, ni la miraba de frente, no cruzaron ninguna mirada, nada que pudiera ir directamente como he comentado antes. Jesucristo le estaba dando la espalda, así de simple, y ella aprovechando su espalda, y la poca comunicación que había entre ellos, tanto verbal como gestual, tocó su manto con una valentía y fe... (de que si así fuera seguro, seguro que sanaría) a ella le daba igual que no la conociera, ni hubiera un mínimo sentir entre ambos, a ella no le importó los sentimientos, (eso de que yo no siento a Dios y esas cosas tan coloquial que solemos decir...) pero ella le tocó cuando estaba de espaldas y fue entonces cuando Jesucristo la miró y la llamó "hija". ¿Te das cuenta? Se dio la vuelta, dejó de darle la espalda, la miró, y le dijo: hija, tu fe te ha salvado.
Aquí en esta escena, podíamos incluir también que ella sentía rechazo por lo que estaba experimentando en su vida, ella podía pensar que le rechazaría, e incluso algo mucho peor como gritarle !inmunda¡. ¡Vete a saber! 
En ocasiones es fácil que ese rechazo haga que veamos la espalda del Señor. Pero un pequeño acto de valentía cambió la situación de esta mujer por completo. Antes de lo sucedido, como he escrito anteriormente, SOLO podía ver la espalda de Jesucristo. (En otra perspectiva, no sentir a Dios). 
A veces hay que hacer un acto, un pequeño acto de fe, un mínimo esfuerzo por nuestra parte, para alcanzar ese milagro, y hacer que Jesús se de la vuelta, nos mire, nos llame hijos, y actúe conforme a nuestra necesidad... El SEÑOR te aseguro, está deseoso. Te ánimo a que tengas ese pequeño esfuerzo y te acerques a él, a JESUCRISTO.

                                                       Un saludo. 



domingo, 10 de septiembre de 2017

ESPERA, NO TE SUICIDES, AÚN HAY ESPERANZAS.

Abandono, ilusiones perdidas, sueños que no llegaron a realizarse, dones y talentos enterrados por culpa del desaliento y el desanimo, por culpa de un espacio de tiempo extremadamente agónico. Palabras infernales, mentirosas susurradas directamente al oído: " No hay salida, dime como lo lograrás, nunca podrás, no vales para nada, no eres nadie, ¡desaparece y apártate del camino, total nadie te recordará!, nadie te echará en falta, nadie te quiere, nadie te necesita..." Y todo ello con un único fin, "tu destrucción".

Aún recuerdo con un aire de tristeza, aquel día de angustia, dolor y sufrimiento, aquella noche de turbada desesperación, donde todo lo que significaba mi persona, mis sueños y mis pensamientos en incesantes golpes de asolamiento se vieron truncados, mi desespero fue tal que llegué a sentir la caricia del viento del mismo abismo. Si no hubiese sido por aquel abrazo fuertemente alentador, se hubiese proclamado en todos mis hemisferios una catástrofe.
La misericordia del Señor jamás permitió que cosa alguna me sucediese en aquel instante. ¿Y sabes por qué? Porque él creyó en mi, porque Dios sí sabía que existía un propósito en mi vida y tenía un destino maravilloso que cumplir.
El Señor desde mi niñez injertó una semilla de fe y en aquel golpe de desesperación, aquella semilla despertó, y fue creciendo... y empezó a darme aliento. Pero a ti ¡oh alama perdida ¿Quién te dará vida si nadie te predica de que existe un Dios que puede cambiar el rumbo de tu historia?

"¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique? Romanos 10:14." 

Estando en el trabajo, escuché una historia reciente y verídica.
"Paseaba por un puente un matrimonio cristiano, cuando de repente sin percatarse anteriormente, observaron con extrañeza a una mujer apoyada en el filo de la baranda, sus intenciones en ese instante estaban difusas para aquel matrimonio, así que sin más, siguieron su rumbo, pero no anduvieron demasiados pasos cuando una voz le susurró al corazón de aquel esposo: "Date la vuelta, mírala, ve y pregúntale en qué puedes ayudarla".
No pudo resistirse a aquellas palabras, así que sin más obedeció. Y al darse la vuelta, aquellas intenciones difusas habían despejado su propósito, aquella mujer quería terminar antes de tiempo su camino. Él se acercó, la miró y le preguntó: "Dime mujer, ¿en qué puedo ayudarla?."
Pero ella guardaba un silencio aterrador.
El hombre insistió, y le hizo la misma pregunta, una y otra vez. Ella desestabilizada por su insistencia le miró; y él le dijo: " No lo hagas, por favor, tenemos la solución para ti, aún puedes cambiar el rumbo de tu vida, si así lo deseas..." La mujer del matrimonio la abrazó y esta desesperada, rompió a llorar entre sus brazos.
Aquella misma mañana comieron juntos, ella entregó su vida a Cristo, sus dos pequeños hijos volvieron a ver a su madre sonreír, pues la vida de aquella mujer empezó a resurgir de las tinieblas y el Señor le empezó a mostrar el camino y la soluciones para todos su problemas. Sus vidas desde aquel instante no volvieron a ser las mismas. Dios una vez más impactó en aquellos corazones."

Pero no todos tiene la misma suerte, cerca de la casa de campo de mis padres vivía un hombre que estaba al frente de una gasolinera, su hogar era su puesto de trabajo, pues allí él tenía su casita prefabricada. Una tarde de verano, dando ya la alarma de las primeras lluvias, pasé con mi coche por ahí como otras tantas veces, pero esta vez hubo algo que me detuvo, bajé del coche y empecé a observar con detalle el gran deterioro que ese lugar estaba sufriendo.
Había pasado ya varios años, tres creo recordar, que aquel hombre de aparente bondad, había decidido quitarse la vida en un árbol, detrás de su casa.
Pensé para mis adentros: "¿Qué hubiera sido de este hombre y de este lugar si alguien le hubiese hablado de Jesús?
Si alguien, le hubiese preguntado en qué momento de su vida se encuentra, tal vez este hombre en su desesperación se hubiera destapado, y hubiese resultado más complicado quitarse la vida."
Tal vez este hombre no tuvo a nadie que le lanzase una cuerda para salir de aquel pozo.
No lo sé, ignoro lo sucedido. Las malas lenguas culpan a su mujer, otros hablan de la perdida económica tan desastrosa... la verdad me es indiferente los motivos, solo sé que desde ese instante tan dramático, la oscuridad y la ruina se apoderó de todo este emplazamiento. Y dicho emplazamiento era refugio del campesino, un lugar de encuentro para regantes. Una estación de servicio donde podías repostar gasolina para seguir con tu destino. Un sitio lleno de bellos recuerdos. Y ahora por culpa de una mala decisión, es pastos de la miseria. Como he escrito anteriormente, por desgracia, no todos tiene la misma suerte...

A continuación mostraré unas imágenes de como quedó aquel lugar después del terrorífico suceso, advierto que estas imágenes no es para expandir el misterio y el mundo del ocultismo, tampoco es para levantar expectación ante el mundo paranormal y sus múltiples ramas, sino para demostrar que cuando una persona decide quitarse del medio, el problema no se va con él, sino que empeora, y ya le será imposible solucionarlo desde el lugar en el que se encuentre.

Porque sí hay solución, el Señor tiene solución para tu vida. Él dice en su palabra:
"Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.  Jeremías 29:11."
" Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces. Jeremías 33:3."
"Venid a mi todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar...  S.Mateo 11:28."

Y así podría citaros miles de versículos que hablan del poder de Dios, de su amor y ayuda hacia nosotros, si decidimos acercarnos a él. Anteriormente como habéis leído, os he descrito algunos testimonios, que hablan de la intervención, de la ayuda divina y del gran cambio que hemos tenido las personas que hemos esperado en Dios. Y no solo son estos dos, sino existen millones de testimonios como estos por todo el mundo, que hablan del maravilloso amor y rescate que tuvo el Señor en sus vidas, tan solo es cuestión de ofrecerle a él nuestro corazón.
"El ladrón no viene sino para hurtar, matar y destruir; YO he venido para que tengan vida, y la tengan en abundancia.  S.Juan 10:10."







martes, 8 de agosto de 2017

DETENGAMOS EL TIEMPO

Este mundo ha cambiado mucho desde entonces, hay momentos que se pueden sentir en el aire, trae en su fresca mano el aroma de aquellos decrépitos años.

Aún esperamos retrasar el tiempo con un beso.

Hazme recordar en una suave y cálida caricia, el recuerdo de aquellos maravillosos​ años que no viví.
Porque el tiempo se acorta y el reloj no cede a nuestros caprichos.

Retrasemos aunque sea por un momento el tiempo...

Eramos aquellos inquietantes amigos, que rotos por el dolor del desamor, decidimos arrancarnos las alas, para dejar volar el corazón con nuestras ganas de amar. 

Detengamos el tiempo por un instante, hagamos que este romance sea un exquisito menú, el más intenso de nuestros acortados días.

Llenemos la mesa de miradas cargadas de deseos.
Brindemos con la humedad de nuestras disfrazadas intenciones.
Recuerda, somos expertos en romper todos los muros que frenaban nuestros desnudos caminos.

No hubo en nuestra vibrante juventud sonrisa que se nos resistiera. Todo estaba en sosegada paz si cerca observaba nuestras miradas.
¿Recuerdas?

Detengamos el tiempo...

Era la sencillez de la amistad, la que decidió que nuestras vidas merecían un codiciado vínculo.
No fueron nuestras intenciones, tampoco la cordura fue la causante... fue el corazón y los sentimientos que dieron paso a este estrépito amor.

Aún no es el final, es el principio de un eterno y deseado idilio.

Porque una vida se hace corta, porque son muchos los que hablan del desgaste, del  vaivén de los años... pero a la verdad contigo todos estos años solo he sentido el amor.
         




miércoles, 29 de marzo de 2017

HIJAS DEL CANTO.

Antes de que la lluvia cese, antes de que apacigüen la voz del esposo, antes de que el sol se oscurezca, aún antes, mucho antes de que las estrellas dejen de tintinear... de que la lámpara se apague y precedentemente tengamos que huir a escarpadas colinas. Nuestra enemistad agónica con lo recóndito seguirá dando gritos de guerra.
Porque las hijas del canto no fuimos selladas para morir en plena batalla. Sino que con cada palabra de voz de atalaya atamos en la tierra las artimañas de nuestros enemigos, como se atan en el cielo.
Amamos decir no a los embeleses de su voz. Escudriñamos sus estrategias con el fin de dar exterminio a su existencia. Nos compadeceremos de su final, pero no sin antes haber pisado con la planta de nuestros pies la cabeza de su aliada, la tortuosa.

Atamos la boca de ellos, no damos lugar al coloquio, no entramos en juego, actuamos y matamos. Obedecen a nuestro mandato, pues saben que venimos en el nombre del que está en lo Alto. Andamos continuamente bajo la sombra del omnipotente, pues aunque seamos más que vencedoras, nuestro corazón está derramado en los brazos de su espíritu.

Él hace convertir el agua en vino, atrae así los corazones con dulces cuerdas de amor. Endurece el corazón del altivo, y da vista al ciego. Hace oír al sordo. Y da vida a los muertos. Todo en él es belleza. Arrodillémonos pues a los pies de su trono y demos honor a su Santo nombre, pues nunca nos negaron su misericordia y su amor es con nosotras hasta el final.

Descubrió el escondite y destapó al escorpión. Lo hizo vulnerable, nos mostró su debilidad. Tan solo debemos esperar en silencio y con su propio veneno morirá. Pues con sus vaivenes de ira y de inseguridad, de su flaqueza a lo prohibido, y de su veleidad preeminente, tiene el terreno ganado a la pura vesania. Tan solo aguardaremos en silencio su final. No daremos lugar al diablo. Y mostraremos toda la cordura que nuestro Dios nos regaló.

El que no sabe distinguirse en un espejo, es porque aún no se ha conocido. Nunca se vio así mismo, y su tendencia será señalar a los demás. A esos ni aún miréis, pues si Dios no les toca, su instinto será destruir todo lo puro y bello. Dejad que las moscas se coma lo que huele a putrefacto. Id tras la voz del esposo y llenad las lámparas de aceite. Tal vez esta noche si así lo desea entraremos en sus aposentos y nos derramaremos entre sus amores... 

Cantar de cantares, amor de mis pasiones, deleite a los labios sedientos, buscamos su rostro, alabanza y gloria. Derramamiento de sus muchas aguas vivas. Fluyen como ríos, en nuestro interior, allí es gestada la vida. 
Manantial de luz, manantial de esperanza. Alianza, pacto sempiterno.

Amor de mis amores. 

Las muchas aguas no podrán apagar el amor, ni lo ahogarán los ríos. "cantares 8:7."


                              



viernes, 30 de diciembre de 2016

MENUDA HISTORIA LA NUESTRA.

Cuando Dios tiene un propósito con una pareja, el camino que tienen que andar, se crea con la sabiduría de lo aprendido. No todo es un deleite, pero todo es un gran plan para lo que Dios los llamó. 
Siempre hay que saber que el Señor deja margen para el romance y para la diversión de la pareja, para la restauración, para la liberación, para la sanación de las personas y para el aprendizaje, y lo más bonito de esto, es que Dios usa todo aquello que les rodea, e incluso las peores situaciones para poder hacer cumplir su propósito y todo ello bajo su preciosa misericordia.

Esto es una carta de amor y de agradecimiento de una joven mujer hacia su esposo, y hacia Dios por haberse cruzado a tiempo en sus caminos.

«Menuda historia la nuestra»

De ser unos completos desconocidos, pasamos a ser conocidos, luego amigos, e irónicamente, el tiempo nos hizo lo mejores amigos, aquellos que se mueren si no están un día juntos. Aún puedo recordar aquellas llamadas que preguntaban con añoranza ¿Qué pasa hoy, no vienes a verme?, o las horas muertas en la peluquería, las risas en los cambiadores de los grandes establecimientos, las muecas escénicas con la música que avisaba que las luces del cine iban a apagarse. Las veces que me dejabas en ridículo haciéndote pasar por un tonto en medio de los centros comerciales, y todo aquel espectáculo era para sacarme los colores. Por no decir, tú típica pregunta, ¿Qué te parezco? ponme un número, del uno al diez. El siete siempre era el mío, aunque para mi fueses el diez.
Espera, déjame sacar de mi baúl aquella noche que te salvé en la playa de aquel corte de digestión por tu estúpida borrachera. ¡Vi un Ángel! Me dijiste, en medio de aquel alboroto.
Me encantaba viajar en autobús para poder ir a verte con alguna escusa tonta que te provocara una sonrisa... 
O aquel golpe de risa que me dio aquella noche de verano al descubrir en tu rostro el reflejo del asombro hacia el universo, y todo fue por mostrarte con un dedo a Júpiter. ¿Acaso no sabrías que junto a mi, años más tarde descubrirías todos los cráteres de la luna y todos los planetas que alcanzarían nuestros ojos.? Y no solo tú sino también nuestra semilla.
Jamás me olvidaré que llegamos a ser esos amigos fugitivos que necesitaban huir de noche, a escondidas, para hablar en todos los idiomas posibles. Aquellos que hacían que el mundo ignorase lo que se escondían entre miradas cómplices. Pero para Dios no había nada oculto que no habría de ser manifiestado... nuestro amor tuvo que ser expuesto a la luz, con gran dolor tuvimos que arrancar y derribar aquellos muros que nos prohibían lo que estábamos sintiendo. Era aterrador sentir aquellos pedazos de remordimientos desprenderse de la piel, pero fue liberador poder vivir el amor con todo el oxígeno que necesitaba cada poro de nuestra piel. El calor que sentí al saber que nunca más lamentaría la soledad humana, aquella que te deja un vacío, sin Dios créeme aquello sería imposible. 
Ahora después de recorrer el camino al altar, y llegar amarnos tanto que dimos su fruto... es inaudito pensar en despropósitos.

 No fue fácil abrazar la desesperación, la angustia del dolor, no fue fácil aprender lo aprendido.  Olvidar lo ignorado. Ser ignorantes en lo sabio. Y ser sabios en lo ignorado. La absoluta madurez se obtiene en los años aprendidos. Es uno largo camino el que hemos recorrido, y el que tenemos por delante... 

Esta felicidad prometida por Dios fue a base de golpes de dolor. Pero llegamos a la meta. Nadie podrá decirnos que aquí no estuvo Dios y que un día salió a nuestro encuentro en aquel camino.

 Llegamos a la promesa y te has convertido en un gran padre, en un excelente cocinero y cuidador, en un íntimo amigo y en un bello amante. En tantas cosas hermosas te has convertido que eres todos los años, el regalo perfecto de los Reyes Magos.
Siempre estaré eternamente agradecida a Dios por ti.

Dios es amor.

Porque tú siempre acabas siendo con Dios lo mejor del año.

Feliz año nuevo.

El Baúl de Cenicienta.
 
             

jueves, 18 de agosto de 2016

LA SERPIENTE Y LA MUJER.


El crepúsculo acaricia estrechamente el horizonte, con su cálido brillo hace descender la luz que tanto desagrada a los que la negaron. La luz muestra tanta cosas escondidas... ¿Verdad?
Hemos oído vuestra llamada de socorro, vuestro delirio desmesurado, muestra un destello eterno, infinitamente imposible para la raza humana. Se alarga en el tiempo. Los mortales no podemos sostener tanta agonía en nuestras manos. 
La moldeamos a nuestro antojo. La rompemos cuantas veces nos parezca, para así poder volverla a rescatar, pues el pensamiento de perderla es aún peor que el de abrazarla, aunque duela.


No hace mucho tiempo, una pitón enfurecida, susurraba encantamientos al oído de una bella mujer. No deseando ser desterrada de su hermoso cuello, la asfixiaba para que no cantara, ni adorara a su creador. Conforme paseaba sigilosamente entre las curvas de su anatomía, enrollaba sus extremidades con su largo cuerpo, para no desprenderse de ella, y así poder poseerla. 
La apretaba fuerte, sin romperle un hueso, la dejaba ausente de sueños. Un día aquella hermosa mujer perdió la visión, su voz se confundió con el sonido del aire, y dejó de caminar. Sus ojos dejaron de mirar al sol, pues aquella serpiente se los cegó. Su pelo se anilló a las ramas de los árboles, y allí enredada entre espinos quedó atrapada la encantadora mujer. La serpiente acabó convirtiéndose en su única compañía...
Nunca supo los motivos, ni se percató de ella hasta que no la dejó en aquella situación. Apareció sin más, y enredada la quiso dejar.
Una noche, paseando por aquel paraje, un hermoso ángel con un resplandor único, la vio. Se acercó a ella, y arrancando todas las brozas y espinas que la enredaban, acarició sus heladas mejillas. La serpiente poseedora de su cuerpo mostró sus dientes y silbó agresivamente, amenazadora se dirigió entre lenguas hebreas al ángel... El ángel miró a la astuta pitón, y le ordenó que la soltase.
Aquella serpiente resistiéndose a la palabra, empezó a desenredarse de la bella mujer. Conforme se deslizaba hacia las extremidades inferiores, aquella hembra, recuperaba la visión e inspiraba aliento de vida.
Pero aquella palabra no bastó para soltarla del todo, pues la mujer poseía la llave para cerrar la puerta de aquel recuerdo por donde entró silenciosamente la serpiente, para así poder desprenderse del todo de aquella enorme pitón.
El ángel, marchó en aquel instante; prometiendo su liberación desplegó sus alas.
La serpiente no pudo volverla a enredar por el poder que ejerció aquel ángel sobre ella. Pero la mujer con la llave en la mano y con el corazón lleno de esperanza, aún quedó presa de la malvada pitón. Tan solo era cuestión de tiempo y de fe. Con una promesa dictada en los aires la hermosa mujer pudo seguir su camino. Recuperó la visión, pero sus expectativas todavía quedaron algo confusas, así que recordando las alentadoras palabras del ángel, recuperó la fe, para poder alcanzar aquella esperanzadora promesa.

A veces nos convertimos en aquella mujer que dejando su camino, nos apartamos para enredarnos en los deseos infructuosos de nuestro corazón. 
Tan solo con acariciar los recuerdos del pasado...
Otras, somos como aquella serpiente, que deseando lo prohibido, enredamos y enredamos a nuestra presa, con un único, déspota y egoísta afán. Saciar nuestra sed y calmar nuestra ansia de lujuria, sin importarnos lo más mínimo nuestra deseada víctima... 

No más... no más. Pues para el que tiene corazón duele. 
No más... no más. Pues para el que tiene remordimientos, grande es su agonía.
Nuestra alma saborea la verdad, nos creamos nuestro propio mundo. Y todo tiene un apocalipsis indeseado. ¿Cuándo? Cuando oigamos de tormentas y estruendos, de terremotos y dolores, pondremos nuestros oídos atentos y dejaremos la musa escapar...


Tan solo olvida.